Cuando se vuelve la vista atrás, es fácil pensar en qué hicimos de una forma determinada y ahora haríamos de manera distinta. Con el tiempo, las cosas tienden a verse «de otro modo». Se tiene perspectiva. Los aciertos se recuerdan con una sonrisa. Y, los errores se suavizan en el recuerdo.
Llevamos algún tiempo queriendo dedicar una publicación a los detalles que muchas novias hubiesen cambiado en su boda, si celebrasen su boda hoy. Con frecuencia, nuestras futuras parejas de novios nos visitan acompañados de familiares que celebraron su enlace hace tiempo. Y de forma habitual escuchamos de forma reiterada la frase: «si volviese a casarme…» seguida de aquello que no fue precisamente un acierto en su boda. O podía haber tenido mejor resultado.
Por eso, vamos a recopilar esas cosas que deberían tenerse en cuenta para que una boda sea lo que siempre soñamos. Porque, es un día muy especial. No va a haber oportunidad de cambiar aquello que hagamos ese gran día. Y, por supuesto, todo deberá ser perfecto. Para que, al volver la vista atrás, no recordemos lo que pudo ser sino lo que fue.
Qué cambiarían en su boda quienes se casaron hace tiempo
1 – El lugar elegido para la celebración
Ocupa el «top» entre lo que cambiarían la mayoría de personas con las que hemos hablado. ¿El motivo? Hace unos años, la costumbre más extendida era celebrar los enlaces en salones de bodas. Lugares, impersonales, faltos de decoración. Y, casi siempre poco alineados con los gustos de los contrayentes. En la actualidad, el lugar elegido para la celebración de una boda debe contar con posibilidades para el tipo de boda que se desea organizar. Un plus, será sin duda, disponer de un lugar de ensueño con fabulosos espacios exteriores como exteriores. ¡No te conformes con menos en tu boda!
2- No darle importancia al reportaje fotográfico
Cuando han pasado unos años desde la boda, se valora especialmente disponer de un buen reportaje fotográfico de boda. Es el recuerdo gráfico de ese día tan especial. Y, no solo deberá incluir los momentos principales, sino mostrar los detalles, ambientes, paisajes e invitados que os rodearon en ese momento de vuestra vida. En La Casona de Las Fraguas somos conscientes de la importancia que tiene para las parejas que celebran su boda con nosotros. Por eso, no escatimamos esfuerzos para que dispongan de rincones exclusivos y únicos. Solo así, pasado el tiempo recordarán su boda como más nos gusta… con nostalgia, alegría y un sentimiento de haber acertado al confiarnos el día más importante de sus vidas.
3 – Escoger menú de boda… ¡sin probarlo previamente!
Si hubiese un punto que mereciese (en nuestra opinión) un lugar destacado, sería este. Como sabes, somos apasionados de la gastronomía. Hemos apostado por ofrecer los mejores menús. Y ponemos a disposición de los novios la cocina de un chef 2* Michelín. Por eso, no entendemos que se elija un menú solo confiando en la opinión de quien te lo sugiera. Piensa que será un detalle más que importante, por lo que es importante no solo degustarlo previamente. E, incluso, personalizarlo según vuestro gusto. Recuerda que es vuestra boda. Y, por supuesto, vuestro criterio es lo que más importa en esta decisión.
4 – Priorizar las opiniones de terceros
No es la primera vez que oímos eso de «hice lo que me sugirió mi madre». O, «me dijeron que eso no estaba de moda». O también, «mi suegra creía que una boda tradicional no podía ser así». ¡Olvídate de todo eso! Es tu boda. Y tú decides cómo deseas personalizarla y hacerla 100% tuya. Por supuesto, la colaboración y aportaciones de familiares y personas cercanas serán bienvenidas. Pero siempre, entendiendo sus sugerencias y comentarios como una ayuda. Nunca como un imperativo. Si eres fiel a tus gustos, no dudes que acertarás y el resultado final será todo un éxito.
Después de ver estos elementos… ¿tienes alguna duda? Si es así, solo tienes que contactar con nuestra wedding planner. Te ayudará con cada pequeño detalle y trabajará contigo. Para que, cuando pase el tiempo, nunca te plantees cómo hubieses querido que fuese tu boda. Ni te plantees eso de … «si volviese a casarme».
Puedes tener la boda que realmente sueñas. ¡Hagámosla realidad!