Una boda con lluvia es justo lo que ninguna pareja de novios desea para su enlace. Porque si existe un “invitado no esperado”, ese es justamente un chaparrón intempestivo que pueda arruinar un día tan esperado y deseado.
Seguramente, los novios llevan meses preparando la boda perfecta. Han escogido un mes de los tradicionalmente menos lluviosos. Y han seguido las previsiones meteorológicas, minuto a minuto, durante semanas. Pero el día amanece nublado y se cumplen los peores presagios. ¡Justo el día más importante de sus vida!
Entonces, ¿qué hacer cuando eso ocurre?
Hoy queremos acercarnos a uno de los mayores “temores” de toda pareja de novios: una boda con lluvia. Y, desde La Casona de Las Fraguas, vamos a facilitar unas claves para que nunca más vuelva a parecerte la lluvia un inconveniente insalvable en una boda.
Cómo es posible vivir sin problema una boda con lluvia
Lo primero que sugerimos, a toda pareja que nos visita para celebrar su enlace en nuestra finca de bodas en Cantabria, es tener en cuenta algunos detalles previos al gran día. Como veréis, pueden ser clave en caso de que la lluvia haga su aparición en algún momento del enlace.
#1 – El lugar de celebración adecuado
Pero, ¿cómo saber si lo es o no? Como punto de partida, debe contar un equipo de profesionales sólido y con una contrastada trayectoria en el sector de las celebraciones nupciales. También, debería disponer de un equipo que esté preparado para desarrollar la boda prevista, independientemente de las inclemencias del tiempo. Por supuesto, debe tratarse de un lugar preparado para afrontar cualquier tipo de inclemencia. Y haber desarrollado con éxito otras bodas que se hayan visto afectadas por lluvia y resuelto los posibles inconvenientes que esta circunstancia causa. De esta forma, te dará la confianza necesaria para afrontar ese día festivo con total garantía y tranquilidad.
#2 – Disponer de la infraestructura necesaria ante cualquier imprevisto
Lo segundo que te recomendamos, e igual de importante, es que el lugar elegido para la celebración de tu boda disponga de toda la infraestructura necesaria para poder realizar lo contratado. Independientemente de sorpresas o cambios climáticos de último minuto. Por supuesto, eso implica, todos y cada uno de los momentos de la boda. Desde la recepción, al cóctel, almuerzo o cena y posterior baile en lugares que no se vean afectados por la lluvia.
Piensa que la variable “tiempo” es incontrolable. Puedes intentar minimizarla, pero nunca podrás tener el 100% de garantías de que el clima se mantendrá estable y sin sobresaltos. Por eso, es imprescindible tenerlo todo bajo control para que algo así de inoportuno no arruine el enlace soñado.
Porque, planteándolo bien, y escogiendo el lugar adecuado para la celebración, una boda con lluvia solo será una más de las mil anécdotas de ese día.
Si al elegir el escenario para la celebración de tu boda, te decantas por un lugar con grandes salones, climatización y zona de baile cubierta, tendrás controladas las posibles sorpresas que puedan generar las inclemencias del tiempo.
Según nos dicen expertas en organización de bodas, y parejas que nos han confiado su enlace, Cantabria, un lugar versátil y que reúne estas características, anteriormente indicadas, es La Casona de Las Fraguas. Por su gran equipo de profesionales, su extensa trayectoria y experiencia en la realización de eventos con lluvia. Y, por toda la infraestructura arquitectónica y logística de que dispone tanto para eventos en exterior como en interior.
Qué «ventajas» tiene un día de boda lluvioso
Así a priori, seguro que más de uno pensará que… ninguna.
Y, aunque puede sonar a frase hecha, te aseguramos que un simple imprevisto como este no es causa suficiente para arruinar ese día tan especial.
De hecho, para muchas culturas, la lluvia es sinónimo de fertilidad. Además, no olvidemos que según el refranero popular español, «novia mojada es novia afortunada».
Supersticiones aparte, verás como un día lluvioso no es algo tan tremendo. ¿Sabes por qué?
Las imágenes del reportaje de boda serán muy especiales
Paragüas transparentes, botas de agua… una boda con lluvia permite obtener fotos creativas, originales y realmente románticas. Porque un día lluvioso lo es. Y, si además, estáis en un entorno natural con bonitos paisajes o edificios singulares, las fotos de ese día os aseguramos que serán espectaculares.
Puede haber alguna sorpresa
¡Si! Nada menos que en forma de arco iris. O, tal vez, disfrutéis la imagen de un cielo que va cambiando de color a medida que pasa el tiempo. Además, no olvidéis al agradable aroma a tierra mojada que suele ser, además de agradable, bastante relajante.
Como ves, no todo el negativo. ¡Ni mucho menos».
Nunca se puede tener la certeza total de que no aparecerá ese “invitado no deseado”. ¡En Cantabria mucho menos! Pero sí vas a tener la tranquilidad de que no será problema el día del enlace.
Porque, cada momento de tu boda siempre será única y especial. Con o sin lluvia.