Cuando se está organizando una boda, si hay algo a lo que es necesario darle su importancia es a hacer una buena prueba de menú. Ya que la prueba del menú nupcial es uno de los momentos, anteriores a la boda, que esperan con más entusiasmo las parejas y sus familiares más cercanos.
Sin duda, se trata de un momento crucial. Porque, como afirma nuestra wedding planner, «es el ensayo general de la boda». Todo debe ser perfecto, nada puede quedar a la improvisación. Y se trata del día en el que comprobarán si todo se ajusta no solo a su gusto y expectativas según su presupuesto y lo que tienen en mente contratar.
Además, posiblemente, sea también el momento en el que los novios más disfruten el menú. Porque, el día de la boda suelen estar muy ocupados saludando y atendiendo a los invitados además de nerviosos. Por eso, es fácil que, ni siquiera, prueban las delicias de bienvenida.
En qué consiste una «prueba de menú»
Como punto de partida diremos que la prueba de menú es simplemente probar, con antelación, algunos platos de la oferta del lugar escogido para la celebración del banquete de boda.
Se trata de un momento emocionante que se suele vivir entre 4 y 6 meses antes del enlace. Y en el que , como indicábamos antes, los futuros contrayentes van a tener la posibilidad de ver materializado el que puede ser el menú de su boda.
Sugerencias para hacer una buena prueba de menú
1 – Elegir bien a los acompañantes
En este día, lo habitual es que los novios estén acompañados por un grupo reducido de personas que pueden ser padres, familiares o amigos muy cercanos. Lo importante al escogerlos es que sean personas con criterio, sinceras y de confianza, que puedan ayudar en la toma de decisión final.
2 – Elegir para probar platos que se ajusten a las expectativas de los contrayentes
En este punto nos referimos a que recomendamos probar aquellos platos que más coincidan con la idea gastronómica que tiene la pareja para la celebración de su boda. Por ejemplo, si el presupuesto barajado no permite incluir bogavante, sería poco práctico incluirlo en la prueba de menú. Ya que se estaría perdiendo la oportunidad de probar otras propuestas que si se ajusten y puedan gustar. O si se busca platos vanguardistas, lo mejor sería dejar de lado las propuestas más tradicionales.
3 – Asegurarse de ver el plato como se servirá en la boda
Es algo establecido que los novios vean los platos que prueban con la ración y el emplatado que llevaría el día de la boda, en caso de ser elegido. Pero, siempre, es recomendable asegurarse de ello consultando que sea así. De esa forma, se evitarán futuros malos entendidos o sentirse decepcionados si algo no se ajusta a lo que se vió y probó en la prueba de menú.
4 – La importancia de los vinos
¡Qué importante es elegir los vinos adecuados que realcen cada plato escogido! Desde La Casona de Las Fraguas, recordamos que los maridajes perfectos son aquellos en los que se potencia el sabor de los platos a través de los vinos que se servirán. Por eso, es recomendable probar diferentes opciones y decidir según los platos que formen parte del menú de la boda.
Finalmente, la última (y más importante sugerencia) es que disfrutéis ese día como si fuese el de la boda. La inmensa mayoría de parejas siempre nos dicen que el día de la boda se les pasó volando y hubo muchos momentos que no tuvieron tiempo material para vivir y disfrutarlo como hubiesen querido.
Por eso, no dudéis en vivirlo al máximo. Y, si tenéis cualquier duda o consulta, solo tenéis que contactar con nuestra wedding planner. ¡Es experta y estará encantada de ayudaros!