El momento de elegir los vinos de una boda es uno de los más temidos para muchos novios. De hecho, es habitual dejarlo en manos del lugar en el que se celebre la boda. De familiares o, incluso, de amigos que afirman entender del mundo del vino.
El vino, con frecuencia, es el “gran olvidado” de una boda. Pasando a un segundo plano frente a otros elementos como el menú, los detalles con los que los novios deciden sorprender a sus invitados o la música que va a sonar a lo largo del evento.
Hoy, queremos reivindicar el importante papel del vino en una boda. Porque el consumo de vino en el mundo es algo muy antiguo. De hecho, la primera referencia que tenemos del vino en una boda, es en el Cristianismo, en el Nuevo Testamento, en sus relatos sobre las “Bodas de Caná”. Si nos adentramos en la Historia, la evidencia más antigua del cultivo de la viña se remonta al cuarto milenio A.C. en Mesopotamia (hoy Egipto y Siria). Y la elaboración del vino fue una práctica corriente en Oriente Medio y parte de China ya desde 3.000 años a.C. Debido a las favorables condiciones climáticas del Mediterráneo para el desarrollo de la vid, su cultivo se generalizó.
Sugerencias para elegir el vino perfecto en tu boda
En La Casona de Las Fraguas conocemos la importancia de un buen maridaje para obtener el objetivo de una boda perfecta. Por eso, vamos a daros estas breves pautas que esperamos os ayuden a elegir los vinos de una boda casi como un profesional.
1. Primero, siempre elige el menú
Puede parecer que el orden en este punto no es importante. Pero lo es…¡y mucho! Te animamos a escoger primero el tipo de menú que se va a servir. Platos y orden. No será lo mismo escoger los vinos de una boda con platos de invierno que los de una boda de verano a base de platos fríos. Por eso, siempre priorizamos el menú. Y, a continuación se incorporarán los vinos que creamos más adecuados para realzar cada plato.
2. Opta por vinos con maridajes “poco complicados”
Es importante tener en cuenta que se va a servir vino para un número importante de comensales. Cada uno tiene un gusto particular y, por ese motivo, es importante elegir vinos fáciles de beber. Que gusten a la mayoría de invitados. Para ello, se sugiere escoger vinos elaborados con variedades de uvas autóctonas o de consumo extendido.
3. Vinos de la tierra y denominaciones de origen conocidas
No nos cansaremos de insistir en que una boda no es el momento para improvisar ni arriesgar. Para evitar sorpresas indeseadas, te recomendamos ir a “valores seguros”. ¿En qué consisten? En vinos de prestigio con los que la calidad esté siempre asegurada. Vinos de denominaciones de origen conocidas con unas características propias que los hagan óptimos para acompañar los platos incluidos en el menú de la boda.
4. Pruébalo siempre antes de la boda
Nadie duda de que antes de la boda se hará una prueba de menú. Asegúrate de que vaya acompañado de los vinos y añadas que se servirán en la boda. Aunque sea un vino de confianza, es recomendable degustar una de las botellas previamente para tener la garantía de que está en perfectas condiciones.
5. Sigue las indicaciones de expertos
Ante la inmensa oferta de vinos existente en la actualidad, nada mejor que ser aconsejado por un experto en la materia. En ese caso, el sumiller del lugar donde celebres tu boda será la persona idónea. Piensa que está acostumbrado a maridar menús de lo más variopintos. Y si los vinos que te proponen no son 100% de tu gusto, no dudes en comentarlo con el experto. ¡Seguro tendrá propuestas interesantes para tu boda!
Y, por supuesto… recuerda que no todos tus invitados tomarán alcohol. Por lo que deberás tener previstas propuestas que no lo incluyan.
Si no lo has hecho todavía, te invitamos a adentrarte en el interesante mundo del vino. Es apasionante y, como comprobarás, siempre hay un vino especial por descubrir. De esa forma, comprobarás que elegir los vinos de una boda nunca más será una preocupación. ¡Ya nos contarás tu experiencia!