Cómo organizar una preboda perfecta

Cada vez es más habitual que las parejas piensen y se planteen organizar una preboda el día anterior a su enlace.  Este tipo de celebración ha ganado protagonismo en los últimos años. Y, excusas, la verdad, es que no faltan para prepararla.

La organización de la boda implica meses de trabajo y coordinación. Son infinitos los detalles que se han tenido que preparar y tener en cuenta y todo debe quedar según lo planificado.

Pero, cuando llega el «día B», todo eso en lo que se ha puesto tanto tiempo, dedicación e ilusión pasa volando. Y, eso hace que los contrayentes  desean prolongar la celebración. Y, para lograrlo, nada mejor que organizar una preboda divertida.

Te proponemos hoy, conocer un poco más este tipo de celebración que tanto disfrutan tanto los novios como sus invitados y que puede ser la sorpresa con la que asagajar a los asistentes. A continuación, te damos unas cuantas buenas razones para celebrarla. Así como las claves para que tu preboda sea simplemente, perfecta.

Ventajas de organizar una preboda

A priori, el principal motivo de celebrar una preboda siempre será pasar un buen rato junto a amigos y familiares. Pero… ¡hay muchas más razones!

De hecho, te aseguramos que se trata del tipo de evento ideal para dar la bienvenida y estrechar lazos entre los invitados y la pareja de anfitriones. Al tratarse de un momento más relajado, y con menos protocolo que la boda, será más fácil que  los asistentes se conozcan de forma distendida. De ese modo, romperán el hielo inicial y les será a todos mucho más fácil disfrutar las celebraciones principales de la boda.

Es una magnífica forma de tener un día divertido y agradable. No dudes en reunir a tus seres queridos el día anterior y haz todo lo posible para que se convierta en una jornada inolvidable para todos.

En caso de que decidas celebrar una boda íntima o no te sea posible incluir en la lista de asistentes a la boda a todos aquellas personas cercanas con las que te gustaría compartir ese gran día, siempre puedes invitarles a una fiesta preboda. Si organizas una boda íntima con un número limitado de invitados, será la oportunidad perfecta para recordarles que son importantes para ti y deseas compartir con ellos parte de la celebración.

Cómo organizar la preboda perfecta

#1 – En primer lugar, escoge bien el sitio

Como es de suponer, la fecha de la preboda será el día anterior al enlace. Por lo que, aunque las posibilidades de encontrar el lugar adecuado son infinitas, te sugerimos celebrarla en un lugar próximo al del enlace. De ese modo, los asistentes no tendrán que hacer grandes desplazamientos. En La Casona de Las Fraguas, siempre nos alegra preparar este tipo de celebraciones porque siempre son un acierto. Como sugerencia, si eliges una finca con espacios al aire libre, el acierto será total.

#2 – Quién asistirá

En la preboda no tienes por qué incluir a todos los asistentes a las celebraciones oficiales del enlace. Puedes hacerla con familiares, con amigos o parte y parte. Hay quien opta por incluir en la preboda a quienes no se ha podido incluir entre los invitados a la boda. Y, en otras ocasiones, es la oportunidad de que se conozcan los amigos de los novios. O sus familias. Todo dependerá del tipo de preboda que desees hacer y del objetivo que tengas en mente al prepararla.

#3 – Lo que no puede faltar

Hay tres «ingredientes» imprescindibles que no pueden olvidarse al organizar una preboda: comida, bebida y música. No es necesario que se convierta en una segunda boda. Pero sí deberás tener preparado un pequeño catering, bebida para los brindis y, por supuesto, música para acompañar el baile. Es un tipo de reunión informal y divertida. Sin protocolos. En la que poder conocer a las personas con las que se compartirán los momentos de la boda. Y el objetivo siempre será dar la bienvenida, agradecer el cariño mostrado y que ningún invitado se sienta solo o fuera de lugar. Ten esto en cuentay… ¡será todo un éxito!

#4 – El look ideal

En tu preboda es imprescindible lucir cómoda pero, a la vez, recuerda que tú eres la novia. La protagonista. Y, como tal, no puedes descuidar tu estilismo en ese día. Porque, no olvides que… ¡es parte de la celebración de tu boda! Te proponemos algo acorde al lugar de la reunión y de la hora del día en que se celebre. Boho chic y muy cómodo si es de día. Y algo más de fiesta si es una preboda de noche. Lo importante, que te sientas «muy tú» y te permita disfrutar al máximo de este día tan divertido y especial justo antes de tu boda.

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